Marta y Ana son dos niñas preciosas, hijas de Laura
una amiga que trabaja en la farmacia de enfrente de
casa. Nos conocemos de hace mucho tiempo y tanto
ella como sus compañeras han sido mi "control de
calidad" en esto de las manualidades. Me han dado
siempre su opinión acerca de las cosas que hago, son
las primeras que las ven y siempre me animan a seguir.
Para agradecerle su amabilidad he hecho estas letras
que decorarán la habitación de las niñas.